Viviendo con el enemigo

Ella desperto esa mañana con toda la esperanza del mundo, con el calido beso que el sol le deja a cada amanecer. La promesa de dias mas tibios estaba inscrita en el cielo, y en su agenda miles de dias libres para aprovecharlos.

Ocho de la mañana, todo es silencio a su alrededor, tipico de los domingos por la mañana.
Pero en sus pensamientos, no deja de imaginar que ella es la nube que acaba de ver por la ventana. O podria ser la lluvia ...

Recuerda que hoy esta invitada a pasear por el borde del canal con sus amigos, hay un gran festival cultural que empezo el jueves, no hay que perderselo, es el ultimo dia.

Se viste rapidamente, prepara su desayuno, y se encierra en el baño. Ahi secretamente va a usar de toda la magia del maquillage para esconder lo que ella considera su problema.
El reloj marca el paso del tiempo, se apresura mientras le hecha una mirada. Un toque de perfume y quedo lista. Nunca podria haberse visto mas linda, mas sonriente y feliz.
Se escapa por el pasillo que ya le indica el camino hacia la salida, pero el la detiene con su mano robusta.

- ¿ A donde vas ? ¿A que hora vuelves ? Apretandola mas fuerte para hacer presion.
¿ No te olvides que aqui aun mando yo, espero que no vayas a avergonzarme por ahi.
¿ Me oyes ?

Ella responde con un gesto de négacion, mientras trata de librarse de esa mano. Cierra la puerta y arranca por las escaleras de edificio.

En la calle camina apresurada...va corriendo, va llorando.
Ya no se juntara con sus amigos, pues sabe que las lagrimas le quitaron el maquillage, dejando aparecer alguna muestra de lo que fueron los golpes que recibio la noche anterior.

Menos mal, la nubes se acumularon, iniciandose una tormenta con mucho viento y lluvia. Ya nadie anda en las calles, no necesita esconderse, por primera vez se siente libre... olvivando el dolor que cubre su cuerpo, dificultando sus movimientos.

¿Las cosas podrian ser diferentes ? Nadie escoge ser rechazado... nadie escoge tener el enemigo en casa.